Cada vez más personas buscan acudir a terapia -a veces buscando diagnóstico o con  diagnóstico previo, y otras veces sin necesidad de él-   con el objetivo de encontrar un lugar propio donde poder conocerse a sí mismos y hacer frente a los acontecimientos y dificultades por los que todos atravesamos en la vida. Por esta razón, en ECLADE trabajamos a partir del caso único, desde la escucha y el respeto por su propia subjetividad, creando recursos que parten de la elaboración de cada persona acerca de sus circunstancias y necesidades. 

En el tratamiento, observamos cómo la aparición de diversos malestares o síntomas (estrés, ansiedad, miedos y fobias, depresión, dificultades de adaptación y relación, depresión ideas o conductas obsesivo-compulsivas, etc.) dificultan o interrumpen el transcurrir vital, a veces sin comprender su sentido. Un proceso terapéutico es un proceso creador que permite encontrar otras respuestas ante las dificultades y el devenir de la vida.